De Botones y Un Corazón






Se me fueron abriendo las costuras de la memoria: 
ya me estaba acostumbrando a vivir sin ti.
Pero tus fragmentos estallados se han ido
buscando, encontrando, sin cicatriz ni señal.

"Creí que te habías muerto, corazón mío..."
Ana Rosetti

Quiero desabrochar los botones de la noche para encontrarte.

La Fisura del Sentido






Escena XIX

¿Qué es la vida? Un frenesí.

¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,

y los sueños, sueños son.

Monólogo de Segismundo.
Pedro Calderón de la Barca

Ningún sueño encaja por sí solo. A veces los sueños se tocan con los bordes y otras veces se tapan completamente unos a otros, como piedras debajo de un río.

Anoche soñé que me había dejado los sueños olvidados en una isla. De pronto apareció un hombre que andaba buscando los pedacitos de un sueño mientras daba vueltas y vueltas por el mío; los recogía, los ataba con una cinta y los guardaba bien guardados. Pero no estaba solo; le seguían un enjambre de sueños que exigían a grito pelado ser soñados.
Habían sueños con sombrero de copa,
sueños de nombres capicúa,
sueños envasados al vacío,
sueños rellenos de trufa,
sueños con dedicatoria,
sueños jamás soñados,
sueños con peinetas,
sueños hiperbóreos,
sueños canjeables,
sueños de papel,
sueños autistas,
sueños polares...

... todos sin alas, todos haciendo cola.

Comprendí entonces que allí era donde iban los sueños que siempre esperé, instalados en el umbral del sueño, en un afán estéril de hallar la fisura del sentido.

El Hueco de mi Cuerpo






Soy vuestra voz, calor de vuestro aliento,
El reflejo de todos vuestros rostros,
Es inútil el batir del ala inútil:
Estaré con vosotros hasta el mismo final.

Para Muchos
Anna Ajmátova

"Te fuiste y el cielo llora, el viento pasa y yo me quedo."

Si quisiera decirte algo, no podría.
Y ante tal afirmación, mi alma se siente herida.
No creo saberlo todo, le digo al sentirla, y resuelta me señala. No veo lo que quiere. No es mi culpa; me volví ciega con los años. Pero ella me mira... Mi alma me mira. Lo sé porque siento cómo quema por dentro. Y su extraña voz me deshila:

- Aún tienes cuerpo y yo sigo estando vacía.

Reflejos Acuáticos





Poem 90
como si yo
fuera el agua
y tú
la luna
y te viera allí colgada

y yo esperara


Piel de la Lluvia 
''Cada segundo, cada minuto, cada hora transcurre a una velocidad tan cruelmente veloz que pueden llegar a convertirse en años, dejando que un dolor embargue a aquellos corazones que, separados, siguen amándose.''

Ese día Armando no esperó el despuntar del alba para levantarse. Bostezó a la penumbra y esta le devolvió su particular pestilencia acumulada durante la noche permitiéndole regresar al mundo de los vivos.
Su vida era tan simple como un bostezo.

Despertar cada mañana con los primeros rayos de sol, desperezarse a ritmo de flexiones, una ducha rápida mientras la cafetera goteaba su miserable existencia... todo con el tiempo justo, apurando cada movimiento, tratando de liberarse de la imagen de Julia, de su pose insinuante mientras dormía plácidamente, de ese anhelo por querer trepar hacia sus senos para invadirlos mientras la ciudad esperaba con sus calles húmedas y atestadas de transeúntes yendo y viniendo como zombis en medio de un tráfico ensordecedor.
Sí, una vez más, asistiría al gran circo de la vida... o no.
Porque esta vez no tenía prisa.

Se enfundó el abrigo, respiró el ébano frío de la noche y se dejó absorber por la ciudad. Nada de transporte público, nada de ir en coche; caminó durante horas hacia el lugar acordado.

Ahí estaba el puente, meciéndose lentamente al paso del tráfico, resistiendo estoicamente los embates del mar que minaban sus pilotes y corroía sus barandas. Y con la determinación que solo tiene quien ha planeado con lujo de detalles sus acciones, supo que había llegado el momento.

Se subió a la baranda, extendió sus brazos, esbozó una leve sonrisa y saltó al encuentro de lo que alguna vez pensó sería su fin.


*Die Metamorphose als Wesenselement der Poesie

Llorar Hasta Romperse






XII
Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no estoy sola.
Hay alguien aquí que tiembla.


XVI
Mi caída sin fin a mi caída sin fin en donde nadie me aguardó pues al mirar quién me aguardaba
no vi otra cosa que a mí misma.

"Caminos del espejo".
A. Pizarnik


Me doy cuenta de que casi siempre consisto en un punto y aparte.

VENECIA Y MUJER*








*Un destino final para Cuando Me Encuentren...
Por Druida de Noche.
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